Domingo a jueves: 9:00 - 17:00.
Viernes y vísperas de fiestas: 9:00 - 14:00.
Yad Vashem está cerrado los sábados y días festivos judíos.
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Nació en Lodz, Polonia, el 2 de febrero de 1937, con el nombre de Sabina. Sus padres Manya Weintraub de Gerecht y Peretz Gerecht, tuvieron tres hijos: Shimon, Sara y Gershon. La familia fue llevada al gueto de Lodz, pero luego de un tiempo, logran salir a Varsovia para reunirse con parte de la familia materna, pensando que las condiciones de vida podrían ser mejores allí.
Sin embargo, cuando llegaron, vieron muchas más atrocidades. Recuerda con mucha lucidez incidentes que ocurrían diariamente.
“Nunca olvidaré a un rabino a quien los nazis le cortaron la barba, le rasuraron en forma burlona solo una parte de la cabeza, y lo humillaron obligándole a ver por debajo de la vestimenta, la desnudez de mujeres jóvenes. Los nazis reían mientras tomaban fotos.“
La familia logra escapar del gueto de Varsovia, sobornando a un guardia nazi. Sara aún recuerda a su abuela Esther, corriendo detrás del carruaje y llorando. Continuaron hacia Piotrków, donde fue escondida en la casa de unos conocidos de la familia, pero luego de un corto tiempo fue devuelta a sus padres por sospechas de los vecinos. En Piotrków constantemente había redadas, en las que los nazis debían llenar cuotas de judíos que arrestaban. Dependiendo de la cuota que debían llenar, a veces buscaban niños, mujeres u hombres.
Había que aprender a esconderse bien y a estar en absoluto silencio. Fueron varias veces en las que estuvo a punto de ser descubierta. "Recuerdo en una ocasión haber sido escondida en un pequeño armario con una cortina en frente, mientras los nazis registraban la casa. Debí quedarme quieta. Mientras los nazis destrozaban la casa, los oí gritar: “fafluchte juden, alles vas di haf” (-judíos sucios, miren todo lo que tienen-)"
"Estaba aterrorizada y no hice ningún ruido. No fuimos descubiertos, pero se robaron las copas y cubiertos de plata que habíamos traído desde Lodz. Mientras estábamos escondidos, gatos callejeros entraron por la puerta abierta y estropearon la comida que ya estaba en la mesa. Yo tenía tanta hambre. Desde entonces, no me gustan mucho los gatos."
Sara pasó por varios campos, entre ellos el campo de trabajo de Pionki donde su familia trabajó en una planta de municiones, luego en el campo de mujeres de Ravensbruck, y por último en el campo de Bergen Belsen. En una oportunidad iba a bordo de un tren hacia Auschwitz, pero al llegar había tantos otros transportes arribando en ese momento, que para su suerte, fueron desviados. Sara recuerda que su madre siempre tenía un ángel cuidándola:
"En uno de los trayectos en tren, mi madre encontró un pequeño espacio donde sentarse, abrazada con mi hermano, quien apenas era un bebé de meses. Una mujer empezó a quejarse que no era justo que mi madre estuviera sentada, mientras que todos los demás debíamos estar parados por falta de espacio. Mi mamá le dio su lugar. Pasamos por un área donde fuimos interceptados por fuego cruzado entre nazis y partisanos. A la señora a la que le había cedido su espacio mi mamá, la alcanzó una bala y murió".
También recuerda como cada cierto tiempo, los trenes eran detenidos para sacar a los muertos del tren, sus cuerpos eran registrados para despojarlos de objetos de valor e incluso los dientes cubiertos con oro les eran sacados, previo a deshacerse de los cadáveres.
Bergen Belsen fue el último de los campos en los que estuvo y quizá el más traumático de todos. Con mucho dolor, recuerda el día de la liberación de Bergen Belsen:
"Ese día, mi hermano Gershon de seis años, estaba afuera de las barracas cuando los ingleses liberaron el campo. Los soldados, al ver a los prisioneros tan desnutridos, compartieron su comida. A mi hermano le regalaron un tubo de leche condensada, el cual comió en forma ávida. Su cuerpo no logró asimilar ese alimento, después de tanto tiempo de desnutrición severa. Falleció el día de la liberación. Mi mamá me pidió que buscara su cuerpo, quería al menos poder enterrar a su hijo. Salí a buscarlo, pero eran tan grandes las montañas de cuerpos amontonados, cubiertos con cal y arrastrados en masa por una excavadora, que no lo pude encontrar. A mi hermanito menor, no lo pude encontrar".
Sara fue llevada con su hermano y su mamá al hospital en la ciudad de Bergen, donde fueron atendidos de urgencia por tifoidea y disentería.
Posteriormente fue llevada a Suecia, gracias a la labor humanitaria del Conde Folka Bernadotte, diplomático sueco y jefe de la Cruz Roja de dicho país, quien salvó miles de vidas de judíos durante los últimos meses antes de terminar la guerra. Estando en Suecia, su padre, quien había sido separado del resto de la familia y llevado a otros campos de trabajo y de concentración (incluido el campo de concentración de Sachsenhausen en Alemania), logró encontrarlos y reunirse con ellos gracias a un listado divulgado por la Cruz Roja.
Luego de dos años en Suecia, la familia embarcó junta hacia la tierra de Israel, donde vivieron por más de 30 años.
“Entrar a Palestina no fue fácil pero lo logramos. Los británicos, quienes tenían un mandato en esa región, negaban el ingreso a los refugiados judíos. Mi padre hizo arreglos e inventó que nosotros éramos originarios de Palestina, y que estando en Europa de visita nos había sorprendido la guerra...por lo que debían dejarnos entrar de regreso a nuestro hogar”.
En Israel, Sabina cambia su nombre a Sara. Acá conoce a Tzvika Silber, también sobreviviente de la Shoá, quien había sido enviado con su familia a Siberia durante la guerra. Con Tzvika se casan y forman una familia de tres hijos y siete nietos. Sara comparte su tiempo viviendo con su familia radicada tanto en Houston como en Guatemala.
Sara era apenas una niña durante la Segunda Guerra Mundial, pero a pesar del paso del tiempo, hay imágenes dolorosas que jamás podrá olvidar. “¿Dónde estaba Dios?”, pregunta Sara, sin respuesta.
Reflexiona ¿Cómo un gesto de compasión de los soldados de las fuerzas aliadas, al compartir su comida con los prisioneros de los campos, podía ocasionar la muerte, como le sucedió al hermano menor de la señora Sara de Silber?
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