Niños de Transnistria en Bucarest, Rumania, diciembre de 1944

Después de la derrota de Stalingrado y las enormes pérdidas del ejército rumano en el frente, el gobierno de Rumania llegó a la conclusión de que el  resultado de la guerra se estaba poniendo adverso para Alemania, y comenzó a buscar formas de comunicación con los Aliados para retirarse del conflicto. Este cambio tuvo consecuencias de gran importancia en todo lo concerniente a la política del régimen respecto a los judíos. Por ejemplo fueron eliminadas muchas de las barreras burocráticas que impedían a los judíos rumanos enviar ayuda a sus correligionarios en Transnistria. Asimismo se permitió restablecer las conexiones con los guetos de Transnistria.

El 12 de noviembre de 1943 el gobierno rumano autorizó el regreso al país de huérfanos judíos de menos de 12 años. Después de algunas discusiones se elevó la edad a 15 años. El 15 de febrero de 1944 fueron emitidas las órdenes finales  que permitieron a 1.884 huérfanos que se habían concentrado en Mogilev-Podolsk y Trispol regresar a Rumania. Los niños fueron traídos a Iasi y de allí enviados a distintas comunidades judías del país.

Archivo fotográfico de Yad Vashem 100DO6