El Holocausto no perdonó a nadie. Las mujeres sufrieron, fueron perseguidas, arrestadas, deportadas y exterminadas como los hombres. Se sometieron a los mismos tratos de deshumanización, experimentaron los guetos, los internamientos, los campos. Al igual que los hombres, algunas fueron heroínas, participaron en redes de resistencia y salvaron judíos. Muchas han muerto, unas pocas han sobrevivido. Judías o Justas, madres o hijas, esposas o amigas, es a todas estas mujeres que vivieron la Shoá a las que Yad Vashem desea rendir homenaje.
Domingo a jueves: 9:00 - 17:00.
Viernes y vísperas de fiestas: 9:00 - 14:00.
Yad Vashem está cerrado los sábados y días festivos judíos.