Después de la II Guerra Mundial la mayoría de los sobrevivientes del Holocausto se concentraron en reconstruir sus vidas; muchos de ellos lo hicieron en la tierra de Israel, a la que consideraban "el hogar". Los anales de los sobrevivientes del Holocausto que hicieron aliá a Israel aparentemente no tienen parangón en la historia de las migraciones humanas. Muy raramente se ha integrado de forma tan exitosa un grupo de inmigrantes recién llegados a la nueva sociedad, convirtiéndose en socios activos de la conformación de su imagen y carácter.
Desde el día de su llegada a la tierra de Israel los sobrevivientes asumieron dos misiones simultáneas: dar forma y preservar la memoria de la Shoá por una parte, y aportar a la sociedad en general.
Desde la década de los 1950 los sobrevivientes comenzaron a echar las bases de la conmemoración del Holocausto. Fueron los primeros investigadores de la materia, los fundadores de los museos e instituciones conmemorativas y los autores de libros de recuerdo comunitarios. Sus extensas y diversas actividades atestiguan sobre su profunda dedicación al tema y al sentido de misión histórica que tan poderosamente los motivaba. Habiendo sufrido en carne propia el Holocausto, percibían su significado y sabían que tenían que ser ellos quienes lo documentasen. En nombre de las generaciones futuras, temiendo que lo que no sería relatado se perdería para siempre, e imbuidos de un sentido de misión y responsabilidad para con las víctimas, iniciaron la empresa de recolección de testimonios. Simultáneamente tuvieron un rol activo en la preparación de medidas legislativas que aseguraban el estatus de la conmemoración de la Shoá en Israel para las generaciones venideras. En 1953 la Knéset promulgó la Ley Yad Vashem, seguida en 1959 por la Ley del Día del Recuerdo del Holocausto y el Heroísmo.
Al mismo tiempo los sobrevivientes contribuyeron sustancialmente al desarrollo de la sociedad israelí en formación. Muchos arribaron cuando eran jóvenes y rebosantes de entusiasmo y rápidamente se volvieron parte de las fuerzas que luchaban por la independencia de Israel: la Haganá, el Palmaj, Etzel y Leji. Después del establecimiento del Estado de Israel se unieron a las filas de las Fuerzas de Defensa de Israel. Aproximadamente la mitad de los combatientes durante la Guerra de Independencia eran sobrevivientes del Holocausto; muchos de ellos murieron luchando en esa guerra – caídos que apenas si habían conocido la tierra por la que habían luchado, y que en algunos casos eran los últimos miembros de familias enteras que habían sido aniquiladas durante la Shoá. Y a pesar de todo su rol decisivo en el combate representó una especie de "venganza constructiva". La participación de los recién llegados les infundió un sentido de pertenencia y asociación con su nuevo país.
Los sobrevivientes se convirtieron en una parte inseparable de la sociedad israelí, y dejaron un legado evidente en numerosos terrenos: colonización y reclamación de tierras, industria, ciencia, economía, leyes, academia y cultura. De sus filas surgieron pintores y diseñadores gráficos, atletas y artistas, científicos e intelectuales. Esos sobrevivientes lucharon para restaurarse dedicándose a una vida de labor productiva y quehacer creativo.
El sobreviviente Leyb Rochman escribió lo siguiente acerca del rol del Estado de Israel en la experiencia de los sobrevivientes:
"Durante los primeros años después de la Shoá vivíamos vidas de desesperación. Sin embargo nuestra copa de angustia contiene ahora gotas de consuelo… He vivido aquí durante 25 años y puedo atestiguar de mi propia restauración. Aquí nacieron mis hijos… ahora tengo una nieta. Pensé que nunca volvería a ver a mi madre, mi hermana o mi hermano. Ahora los veo una vez más, en los rostros de mis hijos y mi nieta, en mi casa en Jerusalén, como si hubieran renacido ante mis ojos. No es de extrañar que todo lo que ha acontecido aquí nos es tan querido, en nuestros corazones, para nuestras almas. Quizás todos aquellos que sintieron el inmenso dolor del pasado pueden entender lo que hemos conseguido aquí, y qué privilegiados hemos sido."