La búsqueda de la identidad de la propietaria de un medallón encontrado en Sobibór
Durante más de una década Yad Vashem ha coordinado excavaciones en el sitio donde funcionó el campo de exterminio nazi de Sobibór. Las excavaciones son conducidas por Wojciech Mazurek (Polonia), Yoram Haimi, investigador y arqueólogo de la Autoridad de Antigüedades de Israel y el arqueólogo Ivar Schute (Países Bajos). Entre los descubrimientos que se hicieron a lo largo de los años se encuentran los cimienentos de las cámaras de gas, la plataforma de trenes original y una gran cantidad de objetos personales que pertenecieron a las víctimas, entre ellos relojes, joyas y pulseras identificativas para niños.
A fines de 2016 se descubrieron los restos de la barraca donde las mujeres se desvestían y se les cortaba el pelo, antes de ser enviadas a las cámaras de gas, y se encontraron hebillas para el pelo y joyas. Los restos de la construcción encontrada por los arqueólogos están situados en el "Sendero al cielo", el camino cínicamente apodado por los alemanes, usado para obligar a los judíos recién llegados a recorrer hasta las cámaras de gas. Los efectos personales hallados en los cimientos del edificio probablemente cayeron a través de las tablas del piso y permanecieron enterrados hasta que fueron descubiertos recientemente.
Entre los efectos personales hallados en el terreno se encuentra un collar con una estrella de David, un reloj de mujer y un colgante metálico recubierto de vidrio con una imagen de Moisés que sostiene los Diez Mandamientos; en el dorso está inscrito el rezo judío esencial "Shemá Israel". Otro colgante, de forma triangular, llamó la atención de los investigadores, porque tenía detalles identificativos: la fecha 3.7.1929, las palabras "Frankfurt AM" y "Mazal Tov" (en hebreo) de un lado, y en el otro la letra hebrea "He" (que representa el nombre de Dios) y tres estrellas de David.
Con la ayuda de Yad Vashem Haimi pudo especular cuál fue la identidad de la persona propietaria del medallón. Por medio de un trabajo arduo y complicado, los investigadores de Yad Vashem identificaron a la posible dueña como Karoline Cohn, una jovencita nacida en Fráncfort el 3 de julio de 1929. Haimi también consultó el registro de población de la ciudad y descubrió que ese día había nacido una niña judía – Karoline Cohn. El Dr. Joel Zissenwein, director de la base de datos "Transportes al exterminio" [en inglés], un proyecto del Instituto Internacional de Investigación del Holocausto de Yad Vashem, encontró el nombre de Cohn en una lista de judíos deportados de Fráncfort a Minsk el 11 de noviembre de 1941. Si bien se desconoce si Cohn sobrevivió las duras condiciones del gueto de Minsk, su colgante llegó a Sobibór en algún momento entre noviembre de 1941 y septiembre de 1943, cuando el gueto fue liquidado y los 2.000 prisioneros judíos allí confinados fueron deportados al campo de exterminio. Allí, a lo largo del sendero que conducía a las cámaras de gas se desprendió el colgante de las manos de Karoline, o de algún conocido suyo, y quedó en el terreno del campo hasta que fue descubierto.
Otra pesquisa reveló que un colgante similar había pertenecido a una joven que pereció en el Holocausto, nació en Fráncfort y escribió un diario mientras estaba escondida en Holanda – Anne Frank. Después de que el descubrimiento del colgante en Sobibór fue ampliamente publicado, Yad Vashem recibió algunos mensajes de personas que poseen colgantes similares que habían pertenecido a familiares nacidos en Fráncfort.
"Estos hallazgos recientes de las excavaciones en Sobibór representan una contribución importante a la documentación y conmemoración del Holocausto,", comenta la profesora Havi Dreifuss, directora del Centro de Investigación del Holocausto en Polonia, en el Instituto Internacional de Investigaciones, "También nos ayudan a comprender mejor lo que aconteció en Sobibór, tanto en términos del funcionamiento del campo como del punto de vista de las víctimas."
Según Yoram Haimi, "el significado de la investigación en Sobibór sólo crece a medida que transcurren las temporadas de excavación. Cada vez que excavamos revelamos otra parte de Sobibór, encontramos más enseres personales y aumentamos nuestros conocimientos sobre el campo. A pesar de los intentos de los nazis y sus colaboradores de borrar toda huella de sus crímenes, y de los efectos de la forestación y el tiempo, acrecentamos gradualmente nuestra comprensión de la historia del sitio, que anteriormente era conocido sólo a través de los testimonios de los sobrevivientes. Este colgante demuestra una vez más la importancia de la investigación arqueológica de los sitios de antiguos campos nazis. La conmovedora historia de Karoline Cohn es un símbolo del destino común de los judíos masacrados en el campo."
Las excavaciones arqueológicas son financiadas por el Comité Consultivo del Proyecto Internacional para Establecer un Nuevo Museo – Sitio Conmemorativo en el Área del Antiguo Campo de Exterminio Nazi en Sobibór, en coordinación con el Instituto Internacional de Investigación del Holocausto de Yad Vashem